El hijo menor de Donald Trump, y el único hijo que comparte con Melania Trump, se ha mantenido en gran medida alejado del ojo público, al igual que cualquier hijo de un expresidente. Bueno, al menos hasta hace poco. Barron Trump, que acaba de cumplir 18 años, es ahora un estudiante de primer año en la Universidad de Nueva York y un asesor político en ciernes de su padre.
Durante las últimas dos semanas, mi página TikTok For You se ha llenado de publicaciones de estudiantes de la Universidad de Nueva York que publican clips de Barron Trump asistiendo a clases como si fuera un Sasquatch: los videos están todos borrosos y tomados a las apuradas, y en su mayoría muestran a compañeros de estudios tratando de rastrear al alguna vez esquivo Trump. Estos videos crípticos, con ángulos de cámara temblorosos y canciones como “Ridin'” de Chamillionaire, están por todas partes, tomados de videos de estudiantes al estilo “un día en mi vida” y republicados en las docenas de cuentas de fans de Barron en TikTok e Instagram.
Estas publicaciones han obtenido millones de visitas y parecen fotos de paparazzi. Desde el ángulo de la cámara se puede ver que las personas que las filman intentan esconderlas debajo de mochilas o suéteres. Han florecido nuevos géneros de memes de Barron.
Es No es el típico boletín político. Makena Kelly y el equipo de WIRED Politics te ayudan a entender cómo Internet está moldeando nuestra realidad política.
“Creo que Barron podría haber ido a cualquier universidad, pero el hecho de que haya elegido una de las más liberales del país dice mucho”, me dijo Grace Rowley, una estudiante de la Universidad de Nueva York que publicó sobre Barron en TikTok. “Me sorprendió y me intrigó mucho que eligiera la Universidad de Nueva York. Me encantaría hablar con él y leer su ensayo sobre el por qué de la Universidad de Nueva York”.
Este tipo de proyección ha sido parte de la historia de Barron durante años.
Antes de septiembre, Barron era un enigma. No tenía cuentas en las redes sociales y rara vez hacía apariciones públicas. Durante ocho años, su vida personal y sus intereses quedaron librados a la imaginación del público. En 2020, corrieron rumores en TikTok de que sus compañeros de clase de entonces habían identificado su nombre de usuario de Roblox, “JumpyTurtlee”. La biografía de la cuenta decía que el usuario era fanático del anime y el K-pop y apoyaba los derechos LGBTQ+. Si bien el rumor nunca se confirmó, se convirtió en parte del mito en línea de Barron. Los usuarios tomaban videos de él luciendo triste y lo hacían sonar como si fuera miserable y despreciara a su padre, y luego los publicaban bajo el hashtag #savebarron2020.
Barron fue el tema de docenas de relatos de fans en sitios como Archive of Our Own y Wattpad, y en cuentas de fans que reciclan los mismos fragmentos e imágenes una y otra vez. Como señaló el escritor de Slate Luke Winkie a principios de este año, Barron se convirtió en un lienzo en blanco para que cualquiera que estuviera mínimamente interesado en la familia Trump pudiera proyectar sobre él sus propias “fantasías”.