La cancelación de los conciertos de Swift en Viena el 8 de agosto se produjo cuando dos hombres que supuestamente habían planeado un ataque terrorista fueron detenidos por funcionarios austriacos. Según una fuente, uno de ellos había jurado lealtad al EI y quería perpetrar un atentado en el Eras Tour de Swift. De la noche a la mañana, cerca de 200.000 fans iban a acudir a los conciertos en Viena.
Swift escribió que fue gracias a las autoridades que no se lamentaba por “conciertos, sino por vidas”. La artista también analizó la situación desde otro ángulo: muchos fans viajaron miles de kilómetros solo para que sus planes se vieran alterados por eventos imprevistos.
Ella explicó por qué había guardado silencio al respecto hasta entonces, señalando que anteponía la seguridad de sus fans. “Si creo que abordar algo incitará a la gente a dañar a quienes vienen a mis shows, entonces créanme que no voy a hablar de ello en voz alta”, escribió. “En situaciones como esta, el ‘silencio’ es más como discreción: esperar el momento adecuado”.
Después de cancelar los shows que tenían previstos en Viena, Swift regresó y se concentró en su siguiente parada: Londres, donde se supone que actuarán en el estadio de Wembley. Su equipo trabajó en estrecha colaboración con las autoridades británicas y el personal del estadio mientras se preparaban para casi medio millón de fanáticos que asistirían a sus actuaciones en el estadio de Wembley. La cantante se siente aliviada de que los europeos terminaran sanos y salvos a pesar de todos los pronósticos.
Al hablar sobre la etapa británica de la gira, Swift describió lo entusiastas y resistentes que han sido sus seguidores durante todo el recorrido. “Las cinco multitudes en el estadio de Wembley estaban llenas de pasión, alegría y exuberancia”, compartió. “La energía en ese estadio era como el abrazo de oso más grande de 92.000 personas cada noche, y me hizo regresar a un lugar de calma despreocupada allí arriba”.
En su publicación, Swift se sincera sobre los sentimientos encontrados que le generó la cancelación de los conciertos en Viena, así como sobre su compromiso de mantener a salvo a sus seguidores. A pesar del miedo y la incertidumbre, logró completar su gira europea con éxito, lo que generó recuerdos imborrables para sus seguidores.