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Hoy lanzó una nueva herramienta llamada Callaia, que tanto escritores aficionados como lectores de guiones profesionales pueden usar para analizar guiones a 79 dólares cada uno. Usando IA, Callaia tarda menos de un minuto en escribir su propia cobertura, que incluye una sinopsis, una lista de películas comparables, calificaciones para áreas como diálogo y originalidad, y recomendaciones de actores. También hace una recomendación sobre si la película debería ser financiada o no, dándole una calificación de “aprobado”, “considerado”, “recomendado” o “muy recomendado”. Aunque la base de la herramienta está construida con la API de ChatGPT, el equipo tuvo que entrenar al modelo en tareas específicas del guion, como evaluar géneros y escribir la sinopsis de una película, que resume la historia en una oración.
“Ayuda a que la gente comprenda el guion muy rápidamente”, afirma Tobias Queisser, cofundador y director ejecutivo de Cinelytic, que también trabajó como productor de películas. “Puedes ver más historias y más guiones, y no eliminarlos en función de factores que son perjudiciales para el negocio de encontrar contenido de calidad”.
La idea es que Callaia les dé a los estudios una forma más analítica de predecir cómo se comportará un guion en la pantalla antes de gastar en marketing o producción. Pero, según la compañía, también pretende aliviar el cuello de botella que crean los lectores de guiones en el proceso de realización cinematográfica. Con tal avalancha de tareas que revisar, muchos guiones pueden llegar a manos de los responsables de la toma de decisiones solo si tienen un nombre reconocible. Una herramienta impulsada por IA democratizaría el proceso de selección de guiones y permitiría descubrir mejores guiones y escritores, dice Queisser.
La introducción de la herramienta puede avivar aún más el debate en curso en Hollywood sobre si la IA ayudará o perjudicará a sus creativos. Desde el lanzamiento público de ChatGPT a fines de 2022, la tecnología ha generado preocupación en todas partes, desde las salas de guionistas hasta los departamentos de efectos especiales, donde la gente teme que abarate, aumente o reemplace el talento humano.
En este caso, el éxito de Callaia dependerá de si puede proporcionar retroalimentación crítica tan bien como lo puede hacer un lector de guiones humano.
Según Tuhin Chakrabarty, un investigador que estudió lo bien que la IA puede analizar obras creativas durante su doctorado en informática en la Universidad de Columbia, esto supone un desafío debido a lo que GPT y otros modelos de IA están diseñados para hacer. En uno de sus estudios, Chakrabarty y sus coautores hicieron que varios modelos de IA y un grupo de expertos humanos (entre ellos profesores de escritura creativa y un guionista) analizaran la calidad de 48 historias, 12 de las cuales aparecieron en el neoyorquino y el resto fueron generados por IA. Su equipo descubrió que los dos grupos prácticamente nunca estaban de acuerdo sobre la calidad de las obras.
“Siempre que le preguntes a un modelo de IA sobre la creatividad de tu trabajo, nunca te dirá nada malo”, afirma Chakrabarty. “Siempre te dirá cosas buenas, porque está entrenado para ser un asistente servicial y educado”.
Dev Sen, director de tecnología de Cinelytic, afirma que esta característica sí representó un obstáculo en el diseño de Callaia y que el resultado inicial del modelo fue demasiado positivo. Eso mejoró con el tiempo y los ajustes. “No queremos necesariamente ser demasiado críticos, pero buscamos un análisis más equilibrado que señale tanto las fortalezas como las debilidades del guion”, afirma.